29 junio, 2006

Peliculón al canto

Trataré de ser breve.

He perdido la facultad de descubrir películas. Hace años, aunque parece que fue ayer, estaba solo en una sala de cine viendo "Terrorificamente muertos". Evidentemente, antes de Internet y antes de saber lo que era un friki.

Parece que con el tiempo, uno se vuelve un cinéfilo más comodón y escoge las películas que cree con certeza que le van a gustar. Menos riesgo y más seguridad. Y por eso, al mismo tiempo, no nos abrimos a experimentos fantásticos.

Por eso estoy gratamente sorprendido. Ayer oí hablar de una película llamada Bubba Ho-Tep, que lejos de ser una auténtica novedad, tiene cuatro años de existencia. Y hoy la compré en un sitio de segunda mano por cinco euros. Creo que sólo por la presencia de Bruce Campbell (otra vez "Terrorificamente muertos") vale la pena poseerla.

Y aunque el director es un chapucero, porque Don Coscarelli siempre ha sido un chapucero, la película me ha gustado bastante. Pero no porque sea buena o mala, y de ahí que haya querido comentarla en estas líneas, sino por su historia, que resumo en dos líneas: Elvis Presley sigue vivo en una residencia de ancianos y conoce a un viejo negro que cree ser J.F. Kennedy (dice que la parte del cerebro que le dispararon ha sido sustituida por un poco de arena), juntos luchan contra una momia egipcia que mata a los ancianos de la residencia...

Ante una historia como esta, ¡que diablos importa si la peli es buena o mala!

26 junio, 2006

El ocaso de Falcon Crest

La caida fulminante de la audiencia de Falcon Crest fue provocando la huida de todos los actores originales de la serie, salvo la de Jane Wyman, que se aseguraba un buen dinero mientras bajaba el cristal de su coche y con una copa de vino en la mano, sonreía a la cámara.

Los presupuestos eran cada año más deplorables y eso se reflejaba en la magnífica melodía de presentación de la serie, del inagotable Bill Conti, que en la primera, segunda y tercera temporada era recargadísima, con orquestaciones muy impactantes y un número infinito de instrumentos, que poco a poco fue derivando en un rollito sintetizador en plan "lo hago yo solo porque sale más barato". La novena temporada ya no era ni sintetizador de calidad, sino un rollo "new age" bastante ridículo.
La huída de los actores de siempre (el barbas, el del periódico, la mujer del barbas, el rey de la cama, la hispana, el chino, los hijos del barbas -que por cierto solían cambiar de cara-, el abogado, el cura...) tuvo un efecto inesperado en la novena temporada: el mayordomo Chu-Lí (en la foto en la actualidad) consiguió salir en los créditos del principio. Eso sí, despues de un porrón de años.
Y en vez de dejar coleando la serie, los guionistas decidieron terminarla como Dios manda. Por tanto, os invito a seguir el enlace y disfrutar de los últimos dos minutos de la serie. Hace falta ser un productor sinverguenza (pero que muy sinverguenza) para despues de nueve años, ponernos la música "new age", contratar al peor guionista del mundo y terminar una serie histórica de esta manera: http://www.youtube.com/watch?v=MpzGcHRDiQ4&search=falcon%20crest
PD: Por cierto, recuerdo ver en el cine "Golpe en la pequeña China" y el actor que hace de Chu-Li tenía un papel destacado. Y era famoso, todo el mundo gritaba en la sala "Chu-Li, Chu-Li"...

21 junio, 2006

Amores del pasado: Sonia Martínez

Unos meses antes de que llegara Verónica Mengod y Pepe Soplillo a TVE, cuando sólo teníamos dos canales de televisión, existía un programa que se llamaba Dabadabadá. No recuerdo mucho de que iba, salvo que salía el genial dibujante José Ramón Sánchez, que dibujaba a toda velocidad y la expresiva Sonia Martínez.

José Ramón, que claramente se auto-calcaba por aquello de la rapidez televisiva, no sólo era muy cinéfilo sino que hacía unas exposiciones de infarto. Además, ya en aquel momento era el padre de Daniel Sánchez Arévalo, director que ha demostrado su talento en la magnífica película Azul oscuro casi negro.

Y estaba Sonia.

Sonia era perfecta. Cuando sonreía, los ojos se encogían hasta casi desaparecer. Y presentaba el programa con sencillez, nada de los sobrecogedores gritos y aspavientos que futuras generaciones tuvieron que sufrir con Miriam Díaz Aroca o Leticia Sabater.

La vi por primera vez en un programa llamado “3,2,1...contacto” y me enamoré perdidamente de ella. Y no se me ha pasado. Su declive comenzó con unas fotos posando desnuda en Interviú, fotos que eran maravillosas y que marcaron parte de mi infancia, pero que causaron su despido inmediato por parte del ente televisivo. Después vinieron algunas películas, más desnudos, la droga, el SIDA y la prostitución en Madrid.

La última vez que salió en televisión fue en el programa 3x4. Yo ya era mayorcito y Sonia contaba como había salido de la droga, como había dejado la prostitución y tenía el proyecto de hacer una película. Realmente, saber que salía de su infierno personal me hizo muy feliz, hasta que un día apareció muerta.

Ahora he superado su edad con creces y me parece que murió siendo una niña. Y me da verdadera pena no haberme acercado a ella para ofrecerle mi ayuda, un café o una conversación. Que supiera que alguien se acordaba de ella. Lo peor es que no existen en Internet fotos de Sonia en su mejor momento, sólo sus desnudos playeros y su Interviú. Una auténtica falta de respeto y una demostración de que la memoria de los humanos es auténticamente miserable.

Actualización de Enero de 2008: Gracias por todos los comentarios. Uno de ellos, Xabier, ha escrito un blog en el que se pueden ver unas fotos más decentes de Sonia Martínez. Muchas gracias por el enlace.

15 junio, 2006

El regreso de Superman

En pocas semanas, Superman llegará a los cines y a los emules de todo el mundo, pero de momento, son los medios de comunicación los que aguantan el peso del hombre de acero.

Me da igual romper la sorpresa y me paso el día viendo trocitos de la película en muchísimas páginas web. Y tiene una pinta estupenda, pero...

...parece que lo que más me ha llamado la atención son las continuas alusiones al
Superman, the movie de Richard Donner. Quiero decir, lo que más me gusta es la marcha de John Williams en la banda sonora, me gusta Brandon Routh cuando se parece a Reeve (un poco macabro), me gusta Lex Luthor cuando Spacey imita a Hackman... en realidad, parece que lo que me apetece de verdad es ver la película original, donde seguramente Superman vuela un poquito peor, pero tiene más gracia.

Esta noche veré el DVD de
Superman, the movie, que por cierto, es de esos que hay que tener original porque tiene un montón de extras. La Warner está sacando todos los DVDs del hombre de acero a un precio irrisorio para deshacerse de ellos. Lógico, dentro de pocos meses se va a editar el Macro-Pack de Superman con ¡¡¡10 DVDs!!!, incluyendo, como no, la versión nunca vista de Richard Donner para Superman II, una historia algo compleja.

Me quedo con Reeves (George, no Christopher), el tipo de la foto de arriba, gordo y bonachón... Se mató el solito y alimenta la leyenda del maleficio a los actores que encarnan al superheroe. Tambien hay película sobre él, eso que ahora llaman Biopic. La hace Ben Affleck... ¿es eso bueno?

¿Me cansaré pronto?

Hoy comienzo con esta historia. He comenzado tantas cosas en la vida y, al mismo tiempo, he terminado tan pocas, que a lo mejor me canso de escribir en un par de semanas. En realidad da igual... ¿cuando se termina un blog?