24 mayo, 2008

Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal

Ya está aquí, ya llegó, ya la vi.

Antes de contar nada, este comentario está lleno de spoilers, por lo que te recomiendo que si no has visto la película no leas estas líneas. Es una pena que el regreso de Jones al cine te lo encharque un tiparraco como yo haciendo un post.

Dicho esto, me meto de lleno: la nueva película de Indiana Jones (y sé de muchos que me van a lapidar por esto) es absolutamente magnífica. No quiero entrar en compararla con las anteriores porque, como siempre con las películas, hay que dejar que pase un tiempo, que la imagen envejezca y que podamos mirar el metraje con cierta distancia.

Tiene cosillas que no me han gustado demasiado, pero Spielberg sigue siendo el Dios de las películas de acción. Estas cosas las rueda con los ojos cerrados y sigue estando a años luz de todos los directores de cine que ruedan este tipo de cine en la actualidad.

Las secuencias de acción y la planificación es, en algunos casos, absolutamente espectacular. Y los primeros 45 minutos de película (toda la parte del hangar y el pueblo de pruebas nucleares) son perfectos. Mis problemas están más relacionados, como ya comente para La última cruzada, con los cambios en los personajes. Si bien Indiana Jones en seguida es reconocible porque habla y piensa igual que siempre, la entrañable Marion, bebedora, aventurera y dura, se convierte en un personaje cómico que no acaba de cuajar: es demasiado diferente a la Marion del Arca, aunque hayan pasado tantos años.

Spielberg, que hace auténticas concesiones a los que hemos crecido con su trilogía, como repetir la entrada del director del museo a la clase del Profesor Jones, con el mismo intercambio de miradas; tumbar al arqueólogo en un avión y taparle la cara con el sombrero para dormir (como en El templo) o quitarle la mordaza a Marion con el mismo plano que en El Arca, gana la partida por un detalle: el tono de la película.

Hay muchas críticas en Internet sobre la historia del cráneo, lo de los extraterrestres y tal, como si esto fuera peor argumento que las anteriores puestas en escena de Indiana. Yo quiero recordar a estas personas que la segunda película iba sobre tres piedras que daban "poder y gloria". Quiero decir con esto: el cráneo es el MacGuffin y es importante que le interese a Indiana Jones. Al espectador, lo que le interesa es el camino recorrido por el héroe para encontrar la solución. Y repito, ahí es donde gana Spielberg: el tono de aventura, la ambientación de los años 50, la fotografía de Kaminski (que si bien sigue abusando de sus saturaciones de luz, su fotografía en las secuencias del desierto y del Area 51 es espectacular), la música de John Williams, que incluso se mete en el relato para engañarnos y hacernos creer, en la primera secuencia, que están buscando el Arca de la Alianza, y que introduce el tema del Grial y Henry Jones (Sean Connery) para establecer la relación padre-hijo.

Creo que las cosas están en su sitio. Creo que Indiana funciona por la sencilla razón de que se pasa algo más que un buen rato en el cine. Me he reído muchísimo pero con situaciones, no con personajes. Ellos no intentan ser graciosos (error bastante común en la tercera) sino que, con la seriedad que tienen, se enfrentan a situaciones cómicas.

Las escenas que más me han gustado: los títulos de crédito, con esa persecución de unos jóvenes con el coche de los militares. No sólo está endiabladamente bien rodado sino que establece el tono. También me ha gustado mucho el papel del joven Mutt Williams (cuando saca el cuchillo en el bar para luchar contra los agentes no tiene desperdicio); y debo reconocer que mis carcajadas en la escena de las arenas movedizas fueron tremendas ("llámalo cabo").

Con todo, mi escena favorita sitúa a Indiana Jones en un pueblo de pruebas nucleares. Si me hablan de los años 50 en EE.UU. lo primero que me viene a la cabeza son esos desiertos, esos pueblos y esas pruebas. Es así gracias al cine y Spielberg lo recoge francamente bien. Después de que la famosa nevera salga volando, nos regala un plano impresionante de Indiana Jones frente al hongo nuclear.

Pero lo mejor de todo es que, cuando termina esta película, Spielberg ha dejado tantas miguitas, tantos homenajes, tantos cuadros y tantas historias, que uno puede estar hablando sobre estas cosas hasta las cuatro de la mañana, como me pasó ayer...

Ahora, por culpa de él, tengo un sábado por delante en el que estoy como un zombie, perdido en mi casa, y por el que seguramente, este post es tan conciso y tan poco trabajado. Pero quería dejar claro, aún agotado por este fin de semana dedicado a Indiana, dos conceptos:

-Personalmente, la película no me ha decepcionado un ápice. Las dos horas pasan volando y Harrison Ford, en contra de lo que pueda parecer, está magnífico en su papel. Ser mayor da juego a algunos diálogos realmente buenos. Y por supuesto, con la cantidad de imitaciones que hay (léase Sra. Croft y estas de Nicholas Cage pasando por todos los monumentos de EE.UU.) las películas de Indiana tienen ese nosequé elegante y señorial que está a años luz de imitaciones.

- La película, además de Indiana Jones, sigue siendo de Spielberg, eso es una garantía de plena calidad, porque.. Dios mío, como rueda este tipo cuando quiere...

7 comentarios:

  1. Ayer por la tarde visité tu blog, y al leer las primeras lineas de este post te hice caso y no seguí leyendo. Por la noche fuí a verla, y lamento decirte que no me gustó.
    Aunque coincido con todo lo que dices pero la encontré bastante aburrida.

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  2. Querido primo. Quisiera confesarte que estoy un poco decepcionado con este post, porque esperaba encontrarme unos comentarios con los que no estar de acuerdo para meterme contigo. Pero resulta que estoy de acuerdo al 100%, maldita sea... El personaje de Marion, la fotografía del majadero de las luces blancas, los temas de Williams... al final de los créditos hay como unas variaciones en el tema de Indy que me gustaron mucho. Y todo lo demás, vamos, que me lo pasé pipa.
    Total, que iré a otro sitio a buscar bronca...

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  3. Caramba, debo decir que yo también estoy contigo al 100%... :-D

    Me lo pasé en grande en el cine, éste es el Indy (actualizado, y en mi opinión, bastante bien, a los nuevos tiempos que corren) que echaba de menos.

    Incluso ese detalle al final de todo, entre Indy y Mutt, con el sombrero, que da a indicar que "Indy no hay más que uno" :-DDD

    Creo que hay que ver la película como un reencuentro entre los actores, el director, el compositor... y los espectadores. Y en ese sentido salí más que satisfecho.

    Saludetes.

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  4. Pues yo también coincido con tu post, a mi me encantó la película en general. Aunque es verdad que el tema extraterrestre me chocó bastante, pero la misma reflexión que has hecho tú sobre esta temática y la de la segunda pelicula, me hice yo ayer cuando la vi en Antena 3, y tuve que decir para mis adentros: reconoce que este argumento de las piedras malditas no tiene nada que envidiarle al de la calavera... así que ese único incoveniente también quedó reducido. La escena de la serpiente es buenísima, yo también me reí bastante ahí.

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  5. La escena inicial de la persecución es magnífica.

    Volver a ver la caja del arca en el inmenso almacén vale el precio de la entrada.Si solo fuera eso yo ya pagaba para entrar al cine.

    Lo único q me pareció un exceso es lo de sobrevivir a una bomba nuclear metido en una nevera pero ya sabemos q Indiana es un fiera, del mismo Bilbao, vamos!!

    Quiero volver a verla lo antes posible.

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  6. Después de comprobar las dos incursiones innecesarias en las películas de Rambo y Rocky, algunos tenían la sensación de que otro Indiana era otra manera de sacar dinero, bueno una parte de razón si que se tendrá lanzando ese comentario, pero por otra parte este Jones deja un buen sabor de boca y te hace pasar un rato entretenido.

    Para mi la primera hora de película es espectacular, la ambientación, la trama, las persecuciones, todo unido cómicamente, sin que nada tenga una trascendencia definitiva, ha sido como volver a ver los Goonies, o cualquier película de la saga, un divertimento rodado con gran maestría.

    Cada vez mas y esta es mi opinión personal, cuando Spielberg quiere ser Howard Hawks lo hace de maravilla, y lo digo como halago, creo que tiene el don de saber trabajar las escenas e hilvanarlas de una a otra sin darle importancia a la trama, consigue que nos centremos en la escena y de que manera, por eso esta película todo el mundo la contara por capítulos, algo que también ocurría con Hawks, y que tan bien supo trabajar este director.

    La ultima hora de película, pues va diluyéndose, pero aun así mantiene el tipo, por lo que respecta a Harrison Ford esta sublime(este comentario no es nada objetivo), por lo demás ha sido como volver a los 80 y ver este tipo de cine del que nunca debió olvidarse Spielberg y tan bien acostumbrados nos tenia, eso no desmerece para nada el abandono de este tipo de películas aunque yo lo echaba de menos, ya que nadie como el sabe rodarlas.

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  7. Quiero empezar diciendo que la peli me ha gustado... Me ha gustado mucho. sobre todo me han molado los homenajes a pelis anteriores, y el hecho de que empiece en el Área 51.

    Pero por otro lado, creo que sólo lo ha hecho por nostalgia. Tengo que decir que si en lugar de Indiana Jones, la peli fuese, por ejemplo, Chinpum Johnson y el Reino de la Calavera de Cristal habría salido del cine de muy mala leche.

    El problema está en que, 1) han recurrido demasiado al alivio cómico, como bien apuntas con Marion, y 2) le han dado demasiado protagonismo a Mutt, en un intento de perpetuar la saga (esa escena de las lianas es lamentable, por mucho homenaje a Tarzan que se quiera ver en ella).

    ...Y lo peor de todo es que no dejo de pensar en que la peli habría estado mucho mejor sin George Lucas en ella (no se por qué, pero el nombre Jar Jar Binks no dejan de resonar en mi cabeza).

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