26 septiembre, 2008

Dopándome: Toro Salvaje

Como con las grandes cosas que uno tiene en la vida, cuando se ama demasiado algo, se tienen que aceptar tiempos de crisis (y ahora hablo más de las emociones que de la económica). Mi primera crisis seria con el cine ocurrió al cabo de un par de años de estar estudiando en Madrid. Por la mañana trabajaba en la Filmo, por la tarde iba a la Facultad y por la noche al cine. Me saturé y dejé de ir a las salas.

Esa crisis se me pasó con El silencio de los corderos. Alguien insistió en que teníamos que verla, casi recién estrenada y mucho antes de que se hiciera tan popular. Salí de la sala emocionado por las actuaciones, por la música de Shore, por el guión... Hoy día El silencio de los corderos me parece que es una película que está muy, muy bien, pero siento algo más que un cariño especial por ella. Me devolvió la frescura y las ganas de seguir viendo cine.

He vivido esta crisis cuatro o cinco veces en mi vida. Y con todos los problemas que tengo estos días de inestabilidad laboral, de comienzo de colegios, de pensar más en cómo cambiar de hipoteca que en cosas realmente interesantes, no sé muy bien si lo que tengo es el típico pensamiento de "gran parte de tu vida te la estás pasando sentado viendo películas" o "un mal rollo generalizado que poco tiene que ver con el cine".

Total, que antes de que pierda la ilusión, he decidido coger el toro por los cuernos y he inaugurado mi pequeño ciclo de cine con películas que adoro pero que, por algún motivo, hace muchos años que no veo. No me voy a dejar ver cosas como Casablanca, Vértigo, Tiburón, El crepúsculo de los dioses... porque me las sé de memoria y no quiero verlas en plan "qué buena es esta película" sino en plan "oh, Dios, no recordaba que fuera tan buena".

Para eso, en vez de pasarme un rato buscando pelis en las estanterías, he hecho un pequeño acto, de esos con boli y papel en la mano, y me he puesto a apuntar películas que sé que en algún momento de mi vida he pensado que eran las mejores de la historia del cine. Y ayer, a las 24.00 h., con lluvia y tormenta espectacular en la calle, me puse a ver la magnífica edición en DVD de Toro Salvaje.

Película que sólo había visto una vez y de la que en su momento, salí entusiasmado del cine. Poco hay que decir sobre ella: es una obra maestra absoluta. Robert de Niro hace el papel de su vida y, sinceramente, creo que es la mejor actuación que he visto de toda la historia del cine. No por todo el tema de ganar peso, sino simplemente, él es Jake LaMotta.

Joe Pesci, la música de Caballería Rusticana, Cathy Moriarty, el gran Nicholas Colasanto (el viejo camarero de Cheers, absolutamente sonado, que murió al terminar la segunda o tercera temporada). Y sobre todo, el amigo Scorsese, que más que un director de cine es un genio en potencia.

A mí, de Scorsese me gusta todo lo que hace. Repito, todo lo que hace. Es un genio sin paliativos. Desde sus obras menores, como After Hours y Al límite, hasta sus obras maestras, como Uno de los Nuestros, Taxi Driver o Casino.

Hace unos años, a Spielberg le hicieron una entrevista en la cual, el director hablaba de cine y, un poco sin venir a cuento, soltó: "Hoy por hoy, sólo veo un director que realmente me atraiga y que considero un fuera de serie. Ese director es Martin Scorsese".

Y el gran Martin, que ha sustituido a un Robert de Niro de vuelta de todo por Leonardo DiCaprio (parece que sólo él y yo nos damos cuenta del talento de este chaval), sigue haciendo películas que están a años luz de lo que hace el resto de directores de cine.

Martin Scorsese hace cine. Nos pueden gustar más o menos sus películas, pero no hace montañas rusas, ni videoclips, ni series de televisión, ni anuncios... cuando Martin hace cine, hace CINE (así, con mayúsculas).

Y por cierto, Toro Salvaje me ha devuelto cierta estabilidad. Sólo tengo ganas de que sea de noche, los niños estén agotados, mi mujer jugando a ese juego absurdo de encontrar cosas en el ordenador y yo, me pueda poner con la siguiente peli. Ese tiempo me pertenece a mi. Por cierto, la siguiente peli es...

PD: Ayer tuve una conversación absurda que no puedo dejar de transcribir. Por teléfono, en horas de oficina, hablé con el gran Javier por temas de trabajo. Para los que sean amigos personales, bastará con decir que es uno de los gemelos. Su conversación puede tener un fondo surrealista que, a veces, es francamente divertido. La conversación, resumida, fue más o menos así:

Javier: ¿Cómo estás?
Sergio: Más o menos. Jodido porque no sé cómo vamos a salir de esta. La crisis...
Javier: ¿Sí? A mi me preocupa más el tema ese de la máquina de partículas, la de los 27 kilómetros...
Sergio: ¿Eh?
Javier: Dicen que puede crear un agujero negro y entonces... Y además, ayer ví un artículo que hablaba de cómo la capa profunda de los polos se está derritiendo y están saliendo grandes burbujas de metano que van a multiplicar el calentamiento global.
Lo que yo creo es que voy a coger a mi mujer y a mi hijo y voy a darme una vuelta al mundo porque esto se termina.

Viéndolo así, de repente, me importó una mierda la crisis económica.
Javier, que ahora firma en sus emails con la frase de Groucho "Yo tengo principios y si no te gustan, los puedo cambiar": eres grande.

10 comentarios:

  1. Es curioso que menciones "El Silencio de los Corderos" porque en mi caso marcó el comienzo de mi independencia cinéfila. Tenía 14 años, empezaba a comprar mis primeras revistas de cine que sustituyeron a mis Superpop y comenzaba a hartarme de que me costara la misma vida convencer a mis amigas para ver la mayoría de las pelis que me interesaban. Entonces mi hermano y yo, la tarde que llovía el diluvio más grande de la humanidad después del de Noé, decidimos coger un bus e irnos a otra ciudad a ver "El Silencio de los Corderos". Aquí no había llegado y tampoco nadie sabría nada de ella hasta semanas más tarde.
    Acojonados y encantados a partes iguales que salimos de la sala. También un recuerdo especial para ella.

    Casi de acuerdo en todo lo que dices de Scorsese, excepto que no me gustó "Gangs of New York".
    Ey, que yo siempre he defendido el talento de Di Caprio, desde bastante antes de que fuera popular. El Titanic y su carita de niño guapo han sido un lastre a la hora de que le reconozcan su mérito.

    Un genio tu amigo Javier xDD.

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  2. Hum... un ejemplo más de vidas paralelas...

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  3. Sobre Martin Scorsese... como dice el dicho : Sobre gusto no hay nada escrito.

    Dicen las malas lenguas que el oscar que recibio fue porque sus "amigos directores" decidieron que le tocaba recibirlo.

    Sobre DiCaprio, pffff sin comentarios... es que no lo soporto; EHH!!! como actor.

    Y es cierto, creo que también estoy pasando una crisis cinéfila ya que últimamente hay pocas cosas que considere la pena verla.
    Posiblemente mañana vaya a ver la película de Ben Stiller, si voy espero pasar un rato divertido.

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  4. Cuando vi a Leonardo di Caprio pensé :
    Andaaaaa el niño de Los problemas crecen!!
    ¿Os acordáis de esa serie? salía en una de las últimas temporadas. El niño que adoptan en las series americanas cuando los de la familia ya han crecido demasiado

    Yo soy un ente raro porque me impactó mucho Titanic y aunque soy incapaz de volver a tragarme las tres horas, es una película que me gusta mucho. Y me enamoré perdidamente de Jack. Y soy muy fiel.

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  5. Claro que me acuerdo de "Los problemas crecen". Yo amaba a Mike Seaver, jejeje. Ahora es creacionista y tiene una página web de telepredicador...
    Yo la temporada esa de DiCaprio, super enano, la vi en realidad años después, en una reposición.
    Yo no me averguenzo de decir que disfruté mucho con Titanic, y que también me impactó, a pesar de avergonzarme un ratito con el "king of the world" y con todas las escenas de la proa del barco en general. Y Jack era guay. No pienso poner cara de suficiencia cinéfila y decir que la detesto para quedar bien, jejeje.
    Tampoco la he vuelto a ver.

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  6. Me acabo de dar cuenta de que empiezo demasiadas frases con "yo". Perdonad, pero es deformación de escribir frases en inglés, no penseis que soy muy egocéntrica ^_^U

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  7. Creo más en la fascinación por la historia del Titanic que en la película. La película nos gana con la recreación, espectacular, de todo lo acontecido con el barco. Y su hora y media final (a partir del iceberg) es francamente buena. Y también está muy bien la parte moderna, con los del barco obsesionados con la captura del Titanic...
    La hora romántica es, simplemente, mala.
    Hay ciertas historias sobre las que casi todo el mundo siente fascinación y esta es una de ellas. Acabo de terminar de ver la película del Gran Houdini y aún siendo flojita, a todo el mundo le fascina que muera tratando de escapar en uno de sus trucos. Eso convierte la experiencia de ver la peli, sin ser buena, en una experiencia que vale la pena.

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  8. El cine es una droga, legal, pero una droga de las mas fuertes y como droga todos los que estamos enganchados a ella, sufrimos esas fases de amor-odio, de espocas en que no pisamos una sala de cine y luego volvemos y nos vemos tres en un fin de semana... Sin embargo, el cine aunque no lo pisemos, aunque no veamos un dvd, aunque no bajemos peliculas de la mula, esta ahi siempre presente en nuestras vidas, no podemos dejarlo atras por que el siempre nos toma la delantera y por mucho que estemos en una fase de negacion cinefina, nunca le damos la espalda del todo.

    tema scorsese: para mi su obra maestra es sin duda la edad de la inocencia.

    tema titanic: a mi me gusto, a pesar de sus fallos, su historia de amor tontona y demas, creo que conforme avanza y se convierte en una peli de accion con mi adorada kate winslet la peli sube muchisimos enteros.

    tema dicaprio: creo que es buen actor pero como em pasa con bardem, hasta el dia de hoy no he visto nada de el que realmente me haga decir, coño que bueno es. cary grant decia mas cosas con un simple gesto de la ceja...

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  9. Para mí Scorsese es uno de esos directores que no suele defraudarme. La prueba es que después de haberme leído el libro me vi "La Edad de la Inocencia", y en ningún momento sentí esa sensación habitual de desencanto cuando uno se ha formado sus peculiares imágenes en su cerebro durante la lectura. Antes al contrario, ambas se complementaban.

    Y qué decir de otras como "Casino" o "Uno de los nuestros". Cierto amigo mío, bajito como Joe Pesci, solía hacer bromas con el personaje interpretado por este actor. Aunque para nuestra suerte no solía portar encima un bolígrafo.

    Acerca de la magia del cine no podría añadir nada nuevo a lo dicho por el anterior comentarista.

    Un saludo cinéfilo.

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  10. Aun sobrecogido por lo de Paul Newman, y con toneladas de trabajo pendiente para entregar a mediados de la semana que viene, me apunto con Sergio a la moción a favor de De Caprio; en Infiltrados se salía.

    El silencio de los corderos también es uno de mis mejores recuerdos como espectador. Y Scorsese, como buen maestro, también echa algún borrón de vez en cuando. (Gangs of new york. Al límite). Sin embargo, el documental sobre Dylan _no direction home- y El último vals son quizá las mejores películas de música de la historia del cine.

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