04 noviembre, 2009

Tony Awards 2009, casi normal...

(En la foto, Alice Ripley)

Después de un montón de semanas, por fin vi la gala completa de los Tony 2009. Al igual que los Oscars, es un evento que hay que ver, en este caso, porque en Broadway se mueven muchas cosas que dificilmente llegan a nuestros oídos. Y además está presentado por mi adorado Barney de Cómo conocí a vuestra madre...

Y como cada año, hay un número o dos que me cautivan. La verdadera lástima es que la realización televisiva ha tenido errores importantes con el sonido. Y es raro porque estos espectáculos suelen salir perfectamente coordinados. Nunca había visto problemas tan serios como en el primer número musical (que es el más espectacular que he visto jamás, mezclando piezas y artistas de forma increíble) y mucho menos, algo tan español como que un cantante tenga problemas con su micrófono y salga un señor corriendo al escenario para darle al actor un micro de mano...

Pero la verdad es que la gala es espectacular.

Cuando a alguien se le da un premio a toda una carrera, es normal que la gente se ponga en pie y aplauda durante unos minutos. No sé si es espontáneo o no, pero siempre emociona. Lo que es menos habitual es que esto pase en un premio normal, y cuando se lo dan a Angela Lansbury, la actriz que siempre fue mayor, realmente emociona:



Otro de los momentos cumbres del show es la parte de Liza Minelli, que después de tantos descalabros, tantas bodas raras, tanto peso, tan poco peso, tanto peso, tan poco peso... y su abuso de lo que Dios sepa que ella toma... se sube al escenario y... ¡Dios mío! ¡Es Liza Minelli! ¡No ha perdido un ápice de maestría, de voz, de poder sobre las tablas!

Y lo que es mejor, cuando su espectáculo gana un premio, ella agradece a sus padres el don que tiene. Por si no se han dado cuenta, eso significa que sobre el escenario de los Tony 2009, se ha nombrado a Judy Garland y al magnífico Vincent Minelli. Tan lejos y tan cerca.


El musical Billy Elliot se hizo con los premios más importantes. ¿Todos? No. Todos no. Elton John no ganó por la música, y eso le hace estar en el patio de butacas con una importante cara de cabreo, sobre todo cuando va comprobando que todos los demás nominados por Billy Elliot van cogiendo su premio (aunque se le ve realmente emocionado cuando premian a los tres niños del espectáculo).

Es más, cuando todo el equipo de Billy Elliot sube para recoger el premio al mejor musical del año, el productor agradece a un montón de personas y, finalmente, al impulsor de todo esto: Sir Elton John. El cantante se acerca al micrófono y dice, textualmente, antes de hablar de lo importante que es trabajar en equipo y tal: "Quiero felicitar al compositor y al letrista de Next to Normal, espero que sean leales el uno con el otro y que escriban muchos más musicales".

¿Por qué?

Porque uno podría ser mal pensado y creer que hay un mensaje oculto al dúo que ha hecho Next to Normal... al fin y al cabo, por culpa de ellos, Elton John no ha ganado su premio... Ellos se lo han birlado.

Pero aunque sería muy divertido, la auténtica realidad es que creo que lo dice con el corazón. Y lo creo porque he visto tres o cuatro números de Next to Normal y lleva una semana sonando en cualquier equipo de música que esté cerca de mi.

Y es que esa, amigos míos, es la escena que espero ver todos los años en una gala de este estilo. La escena en la que, de repente, alguien me descubre lo que me estoy perdiendo, en la que, solo unos segundos después de haber empezado, ya sabes que has sucumbido ante algo diferente. La escena en la que descubres a la actriz cantante Alice Ripley (en la foto de arriba)... la escena en la que descubres un compositor que no conocías... la escena que me ha llevado a estar loco estos últimos siete días, con un CD permanentemente en mi mano, para escucharlo en donde sea y como sea...

La partitura va directa al corazón, sin pasar por razonamientos. Y la historia... la historia es un dramón espectacular. Y en este número musical, que dura cinco minutos, es sencillamente devastador.

Ella está pirada. Su hijo ha muerto. Pero ella, simplemente, no lo comprende. Y su relación con su marido se resquebraja. El número comienza con la protagonista trayendo una tarta de cumpleaños para su hijo. La pareja discute. Y de repente, el hijo, al que sólo ella ve aparece en escena. Y los tres cantan. Por supuesto, el marido y el hijo no interactúan. Y ella trata de disimular que lo está viendo, que lo está oyendo (me emociona cuando alarga la mano sobre la mesa para tocarle)... Ripley, con una voz maravillosa, tiene la capacidad de concentrar las miradas aunque no cante. Una actriz magnífica.

El número es tan, tan, tan bueno, que sin ver el musical completo (aunque habiéndolo oído mil tropecientas veces), no me cabe ninguna duda: esto es especial. Y ella, con todas las de la ley, también se lleva su Tony a la mejor actriz en un musical para casa. Normal.


13 comentarios:

  1. Me acabo de enterar que se suspenden momentaneamente (se supone que hasta fin de año), el trabajo en la segunda parte del Fantasma de la Ópera por un desafortunado cáncer de próstata de Lloyd Webber.

    Por lo he visto, se ha cogido muy al principio y tiene toda la pinta de que va a salir hacía adelante sin demasiados problemas.

    Pues nada. Lo importante es lo importante y que se cuide, que queremos Lloyd Webber para muchos años...

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  2. Me encanta la Lansbury, desde sus primeras películas en los 40 hasta su papel de Jessica Fletcher. Estaba genial en "El mensajero del miedo" y me alegra ver que sigue en activo.

    Y que lo de Lloyd Webber no sea nada.

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  3. Desde luego es emocionante leerte cuando escribes de este tipo de cosas, porque se te nota entregado.

    He alucinado con ese primer número (maldición! ahora vuelvo a tener mono de ir a musicales!).

    A mí también me encanta la Lansbury. Es verdad que incluso cuando salía en National Velvet o en Sansón y Dalila ligerita de ropa, tenía cara de señora mayor. Siempre me ha llamado la atención eso.

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  4. Sobre Angela Lansbury la recuerdo sobre todo por su papel de Jessica Fletcher, Murder: she wrote.
    (se que tiene un carrerón impresionante) y visto en el vídeo de la entrega de los Tony Awards parece estar en buena forma (me alegro!!!)

    Una de las pocas cosas que tengo clarísimo en esta vida, es que si me llega aparecer Jessica Fletcher, lo primero que haría es irme de la ciudad. Sin hacer las maletas!!!!!
    Donde ella iba; en pocos días alguien moría de manera violenta.....

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  5. No había visto los videos, gracias.

    Lo de Lansbury es inmenso, porque como regla de la industria del cine, la vida útil de las actrices es muy corta, y más para estar nominado y ganar.

    Y lo de Liza, no tengo palabras, tiene muy parecido los gestos de Judy, uno de los pocos casos que los padres le heredan el talento al hijo.

    Me emociono

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  6. Liza Minelli fué la única star que ví cuando estuve en NY, bajando de su limo blanca, aparentemente sobria. Si uno piensa en su ADN, es para echarse a temblar (y por cierto, que poco se habla de Vicente Minelli hoy, con lo gran director que ha sido)

    Un abrazo.

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  7. Joer, Bandini, tu comentario ha sido como abofetearme en plena cara. Es uno de mis directores favoritos y ni siquiera yo hablo de él.

    Curiosamente, con lo amante que soy del cine musical, sigo pensando que Cautivos del mal, que desde luego no es musical, es su mejor película...

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  8. ¿Hay que tener un hijo de esta edad para que se te pongan los pelos de punta con este número? Me entregaría sin dudar a la demencia con tal de poder estar con él, pasando por encima de la opinión de los vivos. Qué mal sabor de boca me has dejado.

    Y he odiado a la Lansbury sin saber por qué durante años. Reconozco su trabajo pero no me gusta y no puedo daros un teoría convincente. Simplemente me desagrada, y eso que soy forofa de La bruja novata, y de el número musical de Portobello Road, donde como Elphaba sabe, se compra y se vende hasta el sol.

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  9. El vídeo es duro, durísimo. No sé si hay que tener un hijo de esa edad, pero si sé que cada vez que lo veo, cada vez que descubro más líneas de diálogo en este musical... más se me ponen los ojos vidriosos...
    Hay una escena, realmente brillante, en la que ella está en terapia y se llama Feeling Electric (un titulo bastante obvio sobre la dureza de la escena)... y es tan oscura, pero está tan bien hecha...

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  10. La Lansbury puede ser vieja, salir ligerita de ropa o lo que le salga del mismisimo, es, fue y sera la Sr Lovett por los siglos de los siglos AMEN a ver cuando hay alguien supere su "Worst pies in London" o su "A little priest".

    Liza con Z en el numero canta fatal pero da igual, es LIZA, y esta ahi de nuevo, meneandose como solo se menea alguien cuyos apellidos son minelli y garland y demostrando por que las leyendas son leyendas. Ademas la cancion no puede estar mejor cogida "The world goes round"

    Next to normal tiene muy buena pinta pero a los musicales modernos siempre les doy un tiempo para escucharlos, para ver si pasan la criba. Me paso con in the height lo escuche y me horrorizo y ahora con el tiempo he vuelto a oir canciones sueltas y me ha gustado mucho...

    Por cierto el año que viene 80 aniversario de Papa SONDHEIM y lo que se prepara es grande: Revival en londres de PASSION (asi en mayusculas) y revival en Broadway de A little night music con la zeta jones de Desiree (asi que cantaria el show stopping number mas show stopping number que hay send in the clowns) y la lansbury de Madame Armfeldt.

    Respecto a Minelli no se habla de el por que para hablar de el hay que hacerlo de Pie o bien de rodillas y claro no es comodo...

    Lo jinetes del apocalipsis, cautivos del mal, hasta ese delirio que hizo con la streisand de On a clear day you can see forever (la escena de la telepatia con montad llamando a barbra mentalmente desde toda la ciudad es absolutamente memorable) son imprescindibles para cualquiera que diga que le gusta el cine.

    He dicho... jajaja

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  11. uy... cómo me gustaría ahorrar para ir a Londres con PASSION. Tal como van las cosas, complicado...
    Aunque la esperanza es lo... etcétera.

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  12. ¿Ein?
    No, gracias. Me vendrían bien los 50 euros, pero creo que, como mínimo, la página web que enlaza su nombre debía tener menos faltas de ortografía...

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  13. es que lo que tienes que hacer es "incertar" que debe ser algo muy tecnico...

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