NO BORRO ESTE POST PORQUE CREO QUE ES PRODUCTO DE SU MOMENTO, PERO ES IMPORTANTE REFLEJAR QUE TODO ERA UN MONTAJE DE EL GRAN WYOMING CONTRA INTERECONOMÍA. YO ME LO TRAGUÉ ENTERITO, INCLUSO CUANDO EN MENEAME YA DECÍAN QUE ERA UNA GRAN BROMA. MIS DISCULPAS A WYOMING, PERO CREO QUE DEBO DEJAR EL POST TAL CUAL...
Y EFECTIVAMENTE, COMO DIGO MÁS ABAJO, WYOMING ES LA EXCEPCIÓN DE LA REGLA...
Antes de empezar, quiero dejar claro que pongo este vídeo porque me ha impresionado bastante, pero está hecho de forma lamentable: en un ensayo, sin que el protagonista sepa que le están grabando, o por tanto, con bastante mala leche.
La fama es una cosa rara. La diferencia entre una persona que sale en televisión y otra que sale en el cine es abismal. Independientemente de la calidad del producto final, el hambre, las relaciones sociales, el estar pendiente de un teléfono... hacen que el actor de cine sea un tipo más o menos llevadero (más normal, los hay mejores y peores). Sin embargo, todos, absolutamente todos los que conozco que salen en televisión, son grandes estrellas egocéntricas e insoportables.
Todos los que conozco.
A los pocos días de trabajar en una tele, enseguida me di cuenta de que si tenía que salir a tomar una cervecita con un compañero, iba a tener que ser con los de detrás de la cámara, porque los de delante no eran tratables. Pero lo más curioso es que me hice amiguete de unas cuantas personas que, por cosas del destino, de un día para otro, dejaban de trabajar detrás para trabajar delante de la cámara. Y por arte de magia, se convertían en seres intratables.
No me pregunten la razón. No sé cómo será con los actores de series de televisión (una extraña mezcla en la que, a lo mejor, se salvan de mi "categórica categoría"). Sólo hablo de presentadores.
Parte de la culpa de que yo, a estas alturas de mi vida, no sea nada mitómano (salvo por mi amor incondicional por los compositores de cine, que por cierto, son bastante normales) lo tiene mi pasado trabajando en televisión. No así en el cine, que incluso conocí algún que otro caballero: en pleno rodaje de Airbag, en un descanso, se organizó un pequeño grupo alrededor de Paco Rabal, desde eléctricos hasta gente de producción. Yo me acerqué por detrás para escuchar algo de la conversación ya que...¡que diablos, era Paco Rabal! Y a los pocos segundos, él se giró hacía mi y me gritó con su particular voz: "¡Chico, coge una silla y siéntate aquí con nosotros!" Un pequeño gesto, muy simple, que para mi, que conocía a muy pocas personas en el rodaje y me moría por hablar con el Sr. Rabal, fue muy importante.
Repito, me da un poco de vergüenza poner esto: el que lo presenta (Intereconomía) es tan impresentable como el protagonista. Y no apruebo, en absoluto, la forma en la que se grabó, pero me ha impresionado demasiado como para no hacerme eco. Lo he visto en Menéame y siempre he pensado que Wyoming era uno de esos que, seguramente, era la excepción de la regla.
Repitan conmigo: "los que salen en la tele, en la vida real son insoportables". ¡Ah! A Wyoming no le falta razón, cuando se trabaja no se debe molestar. Pero son las formas, amigos, las formas...
La fama es una cosa rara. La diferencia entre una persona que sale en televisión y otra que sale en el cine es abismal. Independientemente de la calidad del producto final, el hambre, las relaciones sociales, el estar pendiente de un teléfono... hacen que el actor de cine sea un tipo más o menos llevadero (más normal, los hay mejores y peores). Sin embargo, todos, absolutamente todos los que conozco que salen en televisión, son grandes estrellas egocéntricas e insoportables.
Todos los que conozco.
A los pocos días de trabajar en una tele, enseguida me di cuenta de que si tenía que salir a tomar una cervecita con un compañero, iba a tener que ser con los de detrás de la cámara, porque los de delante no eran tratables. Pero lo más curioso es que me hice amiguete de unas cuantas personas que, por cosas del destino, de un día para otro, dejaban de trabajar detrás para trabajar delante de la cámara. Y por arte de magia, se convertían en seres intratables.
No me pregunten la razón. No sé cómo será con los actores de series de televisión (una extraña mezcla en la que, a lo mejor, se salvan de mi "categórica categoría"). Sólo hablo de presentadores.
Parte de la culpa de que yo, a estas alturas de mi vida, no sea nada mitómano (salvo por mi amor incondicional por los compositores de cine, que por cierto, son bastante normales) lo tiene mi pasado trabajando en televisión. No así en el cine, que incluso conocí algún que otro caballero: en pleno rodaje de Airbag, en un descanso, se organizó un pequeño grupo alrededor de Paco Rabal, desde eléctricos hasta gente de producción. Yo me acerqué por detrás para escuchar algo de la conversación ya que...¡que diablos, era Paco Rabal! Y a los pocos segundos, él se giró hacía mi y me gritó con su particular voz: "¡Chico, coge una silla y siéntate aquí con nosotros!" Un pequeño gesto, muy simple, que para mi, que conocía a muy pocas personas en el rodaje y me moría por hablar con el Sr. Rabal, fue muy importante.
Repito, me da un poco de vergüenza poner esto: el que lo presenta (Intereconomía) es tan impresentable como el protagonista. Y no apruebo, en absoluto, la forma en la que se grabó, pero me ha impresionado demasiado como para no hacerme eco. Lo he visto en Menéame y siempre he pensado que Wyoming era uno de esos que, seguramente, era la excepción de la regla.
Repitan conmigo: "los que salen en la tele, en la vida real son insoportables". ¡Ah! A Wyoming no le falta razón, cuando se trabaja no se debe molestar. Pero son las formas, amigos, las formas...
En defensa de Wyoming, hay que decir que este video puede estar e sacadao de contexto o no. Pero tiene toda la pinta que a partir de ahora en vez de llamarle el Gran Wyoming, sólo sea eso: Wyoming
ResponderEliminarTengo que reconocer que pensaba como tu; Wyoming era de esas raras exepciones en el falso mundo de la televisión.
Me he quedo helao bacalao. Qué pérdida de formas, macho.
ResponderEliminarNo se por que no me sorprendo...
ResponderEliminarJoé q fuerte!!!
ResponderEliminareste tio es patético; de todas formas, no me sorprende nada de nada. El video ayuda a romper con esa tendencia que tenemos a pensar que los que aparecen por la cajita son estupendos y maravillosos....pues no.
ResponderEliminarPues vaya. En mi caso no es tanto que pensara que era una persona maravillosa, como que no esperaba que pudiera acturar de forma tan despreciable con sus compañeros, que no es lo mismo.
ResponderEliminarSupongo que su error es pensar que su trabajo es más especial que el de los demás por el hecho de estar delante de la cámara. Yo también tengo un trabajo,y supongo que la mayoría de ustedes, y también me han molestado en más de una ocasión y me he enfadado, pero no se me ha ocurrido tratar a nadie con esa falta de respeto y esos aires de superioridad.
Por cierto, que sí que me pareció majo Paco Rabal. Me acuerdo de él porque hubo un episodio de la serie Juncal que se rodó en el mismo tren en el que viajaba con mis padres a Madrid.
ResponderEliminarCreo que evidentemente el vídeo se haya sacado de contexto, lo cual ha traído consigo una interpretación que difiere muy ampliamente de su sentido original. En realidad lo que observamos no es más que un ensayo en el que El Gran Wyoming, llevando hasta las últimas consecuencias la práctica de "El Método" encarna a Alec Baldwin en "Glengarry Glen Ross".
ResponderEliminarNo me cabe duda de que a buen seguro a la luz de este matiz que introduzco la opinión acerca de su comportamiento zafio, inpresentable, maleducado, sexista, estúpido, creído, indigno, etc, etc, variará completamente, pues nos muestra una vez más su grandísima capacidad para desarrollar con histrionismo sus ilimitadas capacidades como actor.
Un saludo cinéfilo.
P.D.: no descarto la posibilidad de que como licenciado en Medicina quiera presentarse al casting de "House".
Menudo impresentable. He flipado.
ResponderEliminarParece hecho a posta, en una grabación de "falsas tomas falsas" para poner en el programa pintando al tipo de déspota... O que es un cretino integral. Me intriga ver el programa de hoy.
ResponderEliminar¡ERA UNA BROMA DE WYOMING!!! Pues bravo por él. Retiro mis comentarios despectivos. Sigue siendo el rey. Se la coló a Intereconomía y me la coló de lleno a mi, que por mucho que dijeran que era una broma, en ningún momento pensé que lo fuera.
ResponderEliminarY además, resulta que es mejor actor de lo que pensaba...
Si. Ya. Ajá.
ResponderEliminarSí, Candela, era una broma, las imágenes son claras. Pero claro, además de ser de dudoso gusto, es evidente que el resultado de la broma no va a tener tanta repercursión como el vídeo en sí, lo cual, no creo que sea beneficioso para Wyoming.
ResponderEliminarDe cualquier manera, el peligro de que haya mucha gente que no se crea que es una broma está ahí y es evidente.
De hecho, me parece que tú no te creas que sea una broma, pero está bien hecha, se puede probar que lo es, porque la grabación sigue... si encuentro el vídeo, lo subiré porque creo que debo hacerlo.
.... ¿O es para salir del paso ahora?
ResponderEliminarA joke? Je, pues nos la ha colao a todos de lado, je, je,... Poco más y se monta una manifestación para exigir su cabeza y, de paso, pasarse por Serrano a quemar la embajada norteamericana, que diría C.R. MacNamara.
ResponderEliminarUn saludo cinéfilo.
¿y quien me demuestra que era una broma?
ResponderEliminarPues aquí está la prueba de que era un montaje, aunque seguro que habrá quien persistirá en ver cosas donde no las hay:
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=GZiyWXNOy3M
"Soy cabrón, pero no tanto" Juas, juas...
Ahora en serio, hoy en día hay mucha gente que publica cosas en medios de comunicación sin molestarse en comprobar o contrastar las fuentes "no dejes que la realidad te estropee un bonito titular".
Lo que Wyoming ha hecho es un servicio público. Este video deberían ponérlo en la facultad de periodismo (porque hay mucho chavalín que se titula y cuando va a un medio lo primero que suelta es "a quien tengo que morder, jefe?").
Porque ser periodista debería ser algo más que publicar dossiers que una mano interesada nos pasa por debajo de la puerta del water.
Gloria, tienes más razón que una santa.
ResponderEliminarGracias por comentar.
Sergio... Si te explicara...
ResponderEliminarUna vez escribí al defensor del lector de un diario comentando un error garrafal en un artículo. Se trataba de un tema en el que tengo interés y le especifiqué el error, facilitando además, no una, sino varias fuentes bibliográficas para que vieran que no era una opinión, sino algo registrado en diversos libros por diferentes autores, y coincidente en los datos.
¿Crees que se molestaron en comprobar la bibliografía y publicarlo en la fe de erratas? Pues no, por lo visto, un periodista puede publicar lo primero que le dice la portera que le explicó su primo que le dijo la peluquera que su novio ve escrito en la pared de un lavabo, publicarlo, y quedarse tan ancho... *sigh*
Gloria, Wyoming no es periodista, es cómico, y sinceramente si esto es lo que los alumnos de periodismo deben aprender en las escuelas, apañaditos vamos.
ResponderEliminarEn todo caso, ver a los sesudos analistas de Intereconomía intentar salir del charco ha sido verdaderamente divertido.
Bandini, que Wyoming sea humorista es irrelevante en este caso.
ResponderEliminarComo si la información falsa hubiera sido "colada" por un fontanero una verdulera, un palanganero o una ingeniera de puentes y caminos: La historia es ejemplarizante y el mensaje claro para cualquier aspirante: "hay que contrastar la información antes de hacerla pública"... Y sobretodo contrastarla si te llega anónimamente, aunque, claro, hay quien lleva tantos años tirando de "gargantas profundas" que lo dan todo por bueno.
Y sí, creo que los estudiantes de periodismo harían bien en estudiar este video, porque es evidente que con lo que sea que aprenden/les enseñan ahora, muchos limitan a hacer un copy-paste de lo que pillan en las wikis, o a "morder" a quien ordene "Il gran caporeparto redattore".
No hace mucho a un conocido escritor sudamericano, el colegio de periodistas de su pais le afeó el haber "anaroseado" artículos de otros periodistas... Se defendió, diciendo que, después de todo, el había pirateado artículos de publicaciones extranjeras y no de periodistas colegiados en su pais. Pongo este ejemplo y podría poner muchos más.
Post-Data: ya sabía que Wyoming no es periodista. Se que cursó estudios de Medicina, aunque se gana la vida como humorista/entertainer. Es más, probablemente el mismo Wyoming definiría su profesión tranquilamente, como "payaso".
ResponderEliminarEl tema no es que Wyoming sea periodista o no: el problema no es quien dice que el emperador está desnudo, sino que, en fin, el hecho de que el emperador está desnudo.
Segunda Post-Data: hace un momento he oido por la radio el corte de sonido en el que el "periodista" puesto en evidencia presentaba "la exclusiva"... Como se refocilaba, el hombre. Sabiendo ahora que ni se había molestado encomprobar la autenticidad del video, bueno, como os lo voy a decir... Creo que le han dado su merecido.
Tercera Post-Data: Hoy en día se denomina "periodistas" a cronistas de deportes o cotilleos. creo que, viendo lo que hay en la prensa deportiva y rosa, el apelativo les viene grande. pero esto ya es "off-Topic", como diría Moustache, es otra historia.
Estoy totalmente de acuerdo con Gloria, a mi el primer dia de clase, antes de netrar en materia, lo primero que el profesor puso en la pizarra fue :EL RUMOR NO ES NOTICIA, perodesafortunadament hoy en dia y es lo que trae el mal nombre a la profesion, es que del rumor se hace noticia.
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