27 abril, 2009

Las películas que me entristecen...

... y no voy a hablar de las películas que me hacen llorar, en plan La fuerza del cariño o Cinema Paraíso, sino de películas normales que me provocan una tristeza interna que, entre otras cosas, hace que no las vea tan a menudo como se merecen. Y está tristeza no está relacionada a eventos que sucedieron en su rodaje sino que tienen algún elemento que, directamente, me extrapola de la película para deprimirme.


Aunque intento analizar el porqué de esta tristeza, no sé por qué la siento de forma aleatoria. Quiero decir, me sé mil tragedias de rodajes, pero no me afectan. Ya conté en su día la muerte de Dominique Dunne, la hermana mayor en Poltergeist, y sin embargo, no siento ningún tipo de tristeza. O el tema del doble de James Dean en Gigante, que al morir casi al final de rodaje, los pocos planos que quedaban de él fueron en plan Ed Wood, sacando a un doble de espaldas. Pero tampoco siento tristeza por Gigante. No sé. Creo que es aleatorio. Pero desde luego, no puedo ver estas películas sin que me embriague un mal rollo alrededor del que no puedo ni librarme, ni librarlas a ellas.


La trama: Lo que sería la obra maestra de cualquier cineasta que comienza, es la última película de Hitchcock. He leído mucho sobre ella e intento que me guste, y de hecho, a veces lo logro. Pero tiene demasiados elementos que me deprimen muchísimo. Para empezar, aún siendo muy competente, el director ya estaba muy mayor. Se quedaba dormido en el rodaje, estaba irascible y sustituyó a un actor en medio del rodaje por que “no le veía en el papel”. De hecho, hay planos generales en los que todavía se ve al otro actor. Y se nota una falta de glamour poco habitual en el director inglés.


El creador de La Ventana Indiscreta y Vértigo tuvo su último éxito de público y crítica en una película que, se nota demasiado, la rodó cerca de casa porque no quiso moverse de Los Ángeles. Y lo que en otros filmes es contención, aquí hay demasiado actor pasado de rosca. Tiene ideas visuales buenas, pero en realidad, nada nuevo.


La gran diferencia con Frenesí, rodada unos pocos años antes, es que se había trasladado a Londres (su ciudad natal) para grabarla y eso le dio una vidilla que en La trama no tuvo. Pensar en el mayor genio del cine delegando en los demás, durmiéndose, enfadándose con todos sus colaboradores de antaño... demasiado mal rollo. El final de su vida se acercaba y en sus declaraciones era una parodia de si mismo, hablando de cómo asesinar a la gente y cómo estrangular correctamente.


No puedo sino entristecerme y pensar, como en su cameo de la película, que era sólo una sombra de lo que fue.


Proyecto Brainstorm: Aquí si me toca la tragedia. La muerte de Natalie Wood no es una muerte cualquiera. Y aunque en la película no queda nada de la María de West Side Story, sino una ligeramente hinchada mujer que ha bebido demasiado. Y no puedo sino agachar la cabeza ante el cúmulo de circunstancias.


En realidad, Proyecto Brainstorm es, como película, muy interesante. Un tipo inventa una especie de casco con el que puede grabar sus pensamientos y sensaciones y en una de las pruebas que realiza, muere. Cada persona que se prueba ese casco, puede experimentar la sensación de morir. Pues si unimos esta historia con la historia de Natalie Wood, no mezclan nada bien.


Natalie Wood, que aquí sí fue sustituida en numerosos planos por una doble, tenía una fobia: morir ahogada. Y como todos sabemos, así murió. Estaba en un barco junto a su marido Robert Wagner (el Sr. Hart), con el que pasaba continuas crisis y se separaban y se juntaban cada dos por tres, y su compañero de reparto en Proyecto Brainstorm, el inigualable Christopher Walken. Los tres en el barquito.


Fuerte cogorza se debieron coger que cuando Natalie se cayó por la borda (a Wagner le han perseguido rumores desde entonces) ni uno ni otro se enteraron de nada. Sólo al cabo de unas horas, se dieron cuenta de su desaparición. Otras fuentes hablan de quince minutos de chillidos en el agua pidiendo ayuda, pero Wagner estaba tan enfrascado en su pelea con Walken (al que acusaba de estar liado con Natalie) que ni se enteró.


Sobre esta muerte hay numerosos libros contando cosas del tipo "Wagner gritando “deja de chillar, ahora te recogemos”, hasta el número de uñas de Natalie Wood que se encontraron en la popa del barco mientras trataba de agarrarse.


Vidas rebeldes: Basada en una historia de Arthur Miller (cuya anécdota al comienzo de Los Abrazos Rotos es lo mejor de la película de Almodóvar), es el propio escritor el que habla de esta época como la peor de su vida. Después del rodaje, murieron Marilyn y Gable, que ya de por sí, me daba bastante pena. El actor superó malamente la muerte de Carole Lombard (una vez hice un post sobre su avión estrellado, que asombrosamente, sigue estando en el lugar del accidente. El vídeo sigue activo) y se alistó en la guerra con intención de acabar con su vida.


Una vez superado el trago y habiendo hecho mil películas más, le diagnosticaron una cáncer por el que su voz, en Vidas Rebeldes, es radicalmente diferente a la habitual. Y Montgomery Clift se rompió una costilla. Y Monroe estaba todo el día drogada e ida. Y todos murieron prácticamente sin ver la peli (M. Clift cinco años más tarde). Dicen que Gable vio un primer montaje y afirmó: “es la mejor película que he hecho. Parece que sé actuar”.


Yo no la veo a gusto. Me da mal rollo y aún pensando que es una obra maestra del cine, no creo que la vuelva a ver nunca más. A veces, saber cosas sobre las películas, literalmente las destroza.

6 comentarios:

  1. Mi madre sigue convencida de que robert wagner tiro a la wood por la borda.
    Pues si que dan algo de angustia esas peliculas, cuando lo explicas asi y todas juntas...

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  2. ¡Qué espanto!¡Qué muerte más horrible con y sin toda la parafernalia de gritos y peleas!
    Entiendo que te de penita.
    Bssssssssssss
    Cloti

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  3. Jolines, pues sí que ha dado mal rollito este post... :-P

    Abrazos.

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  4. Morir es fácil, hacer comedia es difícil.

    Grisoom en CSI Las Vegas Temporada 8.

    (vaya frikada acabo de soltar).

    Forma parte de la historia negra de Hoolywood. Siempre había escuchado que la muerte de Natalie Wood tenía un velo de misterio.

    Y hablando de pelis tristes; os recomiendo Réquiem por un Sueño. Ves como los tres protagonistas caen en una espiral de autodestrucción y cuando acaba la película te deja tal mal rollo en el cuerpo........

    Y como estamos de tan buen rollo; hoy me he enterado de la muerte de Beatrie Arthur; una de las chicas de oro.

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  5. Yo me entere el domingo, porque me quede sin canales de Tv, grrr, que haria yo sin internet!!

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  6. Que grande Hitchcock!! Ayer vi de nuevo Topaz; no es tan mala, lo que pasa que se la compara con otras obras maestras del director y cualquiera sale perdiendo!
    Saludos

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