14 junio, 2010

Webber y Rice (3 de 3)

Como Spielberg y John Williams, como el sandwich de jamón y queso, como Phineas y Ferb, Webber y Rice estaban hechos el uno para el otro.

Rice, con un talento innato para escribir letras de canciones y desarrollar historias y Webber con una facilidad melódica casi sobrenatural. Ni Webber mostró interés alguno (salvo algún rollo ocasional) fuera del teatro musical, ni a Rice le interesaba lo más mínimo poner letras a algo que no estuviera cantado.

Y eso viene de lejos. Con el talento de Rice, uno puede pensar que su meta era escribir teatro, sin canciones. Pero su amor por el rock (que incluye una discoteca poco habitual) no dejaba espacio para ninguna alternativa.

El libreto de Jesucristo Superstar es una auténtica obra maestra. Desde la idea, ahora tan manida pero en aquella época tan sublime, de que Judas no es un auténtico canalla, sino una pieza fundamental para que el plan de matar a Jesús se cumpla, pasando por personajes tan rocambolescos como Herodes, han hecho que la apuesta del escritor (y no olvidemos los años, era una apuesta arriesgadísima) fuera un éxito.

Desde mediados de los 60, Rice y Webber trabajaron juntos en mil proyectos. Y de hecho, vivían juntos en un apartamento. Pero nunca llegaron a ser del todo amigos. El joven Webber, adicto al trabajo y con sus metas muy claras, no soportaba a su joven compañero, ligón de ligones, adicto a las vacaciones y que esperaba a la inspiración tomándose unas copas. Webber, todo seriedad y Rice, el bohemio personificado.

Pero como siempre pasa con estas historias, en esos años que estuvieron juntos, se gestó gran parte de la carrera de ambos. No sólo por los trabajos en común (JS, Evita, Joseph...) sino que prácticamente diseñaron sus carreras en ese período. Trabajaron juntos en proyectos como Sunset, en Aspects, en Cats... musicales que vieron la luz mucho después de que ambos rompieran su relación laboral y que, por supuesto, no acreditan a Rice por ningún sitio.

Cuando Webber le contó a principios de los 70 que estaba interesado en llevar la película Sunset Boulevard al teatro, Rice colaboró sin mostrar demasiado entusiasmo: no le gustaba la idea. Sin embargo, Rice insistía en hacer un musical sobre dos jugadores de ajedrez con el telón de acero de fondo, cosa que a Webber no le atraía en absoluto (y que luego se convirtió en Chess, de la mano de los señores de ABBA).

Pero mil ideas de Rice están presentes en esos musicales, de cuando fueron esbozados en esa gran época creativa. La ruptura de ambos, casi precipitada por Webber, que no aguantaba más las ausencias veraniegas de Rice ( a su favor, hay que decir que Rice intentaba que Webber la acompañara en esas vacaciones casi continuas) fue elegante: decidió poner música a unos poemas de T.S. Elliot: Cats.

El movimiento es astuto: no necesitaba pelearse con nadie para poner en marcha el musical. De hecho, en un momento dado, Webber SI necesitó ponerle letras a algunas cosas, trabajar textos, unir y desunir poemas, y trató de que Rice hiciera esa pequeña labor. El escritor, aunque molesto por la jugada de Webber y recién casado y con niños, estaba enrollado con Elaine Page, la cantante principal de Cats (que sustituía a la original Judy Dench, que se había roto "noséquecosa" en los ensayos), y deseaba escribirle la canción a su personaje. Aceptó.

Cuando Webber se enteró de que su cantante principal y Rice estaban enrollados, decidió pedirle al director, Trevor Nunn, que hiciera la letra de Memory (que como ya conté, le ha hecho multimillonario). En un ensayo que tuvo que ser brutal, Elaine Page tuvo que cantar la canción con las dos letras, la de Nunn y la de su amado Rice. Finalmente, se decidieron por el Memory que conocemos. A la Page, como es de recibo, no le gustaba nada esta versión.

A partir de ese momento, los dos encaminaron carreras separadas. Pero mucho queda de esa época creativa, desde el famoso musical inacabado sobre la pelea de Leoncavallo y Puccini, que persigue Webber desde hace 40 años, hasta líneas completas de texto de sus musicales actuales.

La verdad es que Webber, quizá por ser tan extremadamente británico, sólo muestra palabras de cariño hacía su colega... pero Rice suelta perlas que dan un juego tremendo a los periodistas: "¿Que si he visto Aspects of love? Sí, in fact , reconozco muchas cosas."


PD: Para que se hagan una idea de la seriedad de Webber con los escarceos amorosos típicos del mundo del teatro: cuando se enamoró perdidamente de Sarah Brightman, Webber todavía estaba casado. Algún periódico insinuó que el compositor estaba ensayando más de la cuenta con la corista y él montó en cólera. Se pasó toda la noche escribiendo una nota de prensa que decía, básicamente, que sí, que le gustaba, pero que JAMÁS haría nada que molestara a su mujer, con la que estaba en pleno proceso de divorcio. Sólo después de obtener su separación, Webber pondría en marcha su relación con la carita de queso.

8 comentarios:

  1. ¿3 de 3?...

    Quiero más. O me regalas el libro... interesantísimo.

    J.

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  3. el anonimo tranquilo12:51 p. m., junio 15, 2010

    de momento solo una cosa:

    carita de queso? sera de queso de bola con sobredosis de botox o te referias a webber que tambien tiene carita de queso?

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  4. La carita de queso es, claramente, la señora Sarah "hombre brillante"

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  5. el anonimo tranquilo1:37 p. m., junio 16, 2010

    En trabajos tan colaborativos como el cine o la escritura de musicales teatrales la autoria de las cosas siempre suele tener un difuminado que lo emborrona todo.

    Una idea, una sugerencia, lleva a un sitio que luego conduce a otro y que al final de genio de un tercero convierte en algo magico.

    Send in the clowns se escribio en unas horas por que el director le dijo al autor que el personaje tenia que explicar lo que le estaba pasando. Por tanto de quien es el merito de director que pide una cancion o del autor que crea "LA CANCION" en apenas unas horas.

    En el caso de webber y rice, la mano de rice se nota en los mejores trabajos de su carrera (salvo joseph que es un pestiño se mire como se mire) por la mayor complejidad y sutileza de las letras respecto de lo que vendria despues.

    Si Evita hubiera sido hecha en tiempos del fantasma, estoy seguro que la complejidad moral y sobre todo los distintos niveles del personaje habrian desaparecido en favor de una evita unidimensional retratada como una pobre que vive un sueño dorado y muere joven dejando un bonito cadaver.

    En jesucristo pasa lo mismo, con el tiempo no solo se ha visto que el personaje central de la obra es judas, si no que los que de verdad no saben como amarse son Judas y Jesus. ¿Se habrian introducido todos esos elementos de hacerse hoy dia o estarian los personajes tan lobotomizados como los de Love never dies?

    Webber es un tipo con talento y vision comercial, pero creo que alguien mas bien simple, no tiene una personalidad fascinante, no es un ser brillante en cuanto a formas o maneras, necesta de alguien que lo espolee y en su epoca ese fue rice. Hoy dia webber es una multinacional y ¿quien se atreve a meterse o pelearse con una multinacional?

    Su poder ha terminado ahogando a su talento que hoy dia solo aparece en determinados momentos rescatando de la memoria tiempos mejores.

    Sin embargo atribuir todo el merito a rice tambien seria injusto, rice tiene cosas muy buenas sin webber, pero en mi opinion nada a la altura de sus mejores trabajos conjuntos.

    Sus colaboraciones con elton jhon me dejan un poco frio, con menken el trabajo ya estaba hecho por ashman (y siempre me ha gustado mas el duo menken-swartchz ya que adoro el jorobado)

    Como hitchcock y herrmann, dos talentos juntos no suman si no que multiplican. Hitch no volvio a ser el mismo y herrmann tampoco, sus trabajos posteriores aun siendo buenos siempre tuvieron el problema de que aquella magia ya no estaba.

    Las historias de amor no solo se dan entre parejas, a veces las mayores historias de amor son las artisticas.

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  6. el anonimo tranquilo1:41 p. m., junio 16, 2010

    y con historia de amor artistica no incluyo la de webber con carita de queso, que deben ser una de las parejas del show business que menos quimica sexual despertaron en la historia desde que el mundo es mundo. A esos dos los veo hablando de trapitos y tomando te con el dedo meñique tieso pero jamas en la cama teniendo una noche loca.

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  7. Ja, ja, jaaaaaaaaaaa!!!!
    Ahí has estado fino, Anónimo.

    -My Darling.... I have been thinking that tonight... maybe.... we should go to Harrod's...

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  8. el anonimo tranquilo6:30 p. m., junio 17, 2010

    un off-topic total, pero como se que tienes debilidad por ella:

    http://www.youtube.com/watch?v=h8LpUo5Whlk

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