Al lado del Auditorio Alfredo Kraus, en plena playa de Las Canteras en Las Palmas de Gran Canaria, emerge esta estatua, como si saliera del mismo océano Atlántico, del cantante Alfredo Kraus. Y hoy hemos amanecido con todos los periódicos recordando que mañana, 10 de septiembre, se cumplen diez años de la desaparición del tenor canario.
Además de sorprenderme de cómo pasa el tiempo, sólo quiero contar una anécdota que he leído en el periódico de hoy. Aunque Kraus debutó en El Cairo tres años antes, fue en 1.958 cuando se hizo muy popular gracias a una Traviata en Lisboa junto a María Callas.
Evidentemente, Kraus era muy joven y la Callas estaba a punto de finalizar su carrera. Tras las inmensas ovaciones, cuenta la leyenda que María Callas le dijo a Alfredo: "Qué lastima. Ha llegado usted demasiado tarde para mí".
¿No es genial?
A Alfredo Kraus se le ha acusado de muchas cosas, pero hoy día se sigue hablando de él. Posiblemente, y que me perdone Benito Perez Galdós, va a ser nuestro canario universal.
Tenemos testimonios de aquella Traviata:
Además de sorprenderme de cómo pasa el tiempo, sólo quiero contar una anécdota que he leído en el periódico de hoy. Aunque Kraus debutó en El Cairo tres años antes, fue en 1.958 cuando se hizo muy popular gracias a una Traviata en Lisboa junto a María Callas.
Evidentemente, Kraus era muy joven y la Callas estaba a punto de finalizar su carrera. Tras las inmensas ovaciones, cuenta la leyenda que María Callas le dijo a Alfredo: "Qué lastima. Ha llegado usted demasiado tarde para mí".
¿No es genial?
A Alfredo Kraus se le ha acusado de muchas cosas, pero hoy día se sigue hablando de él. Posiblemente, y que me perdone Benito Perez Galdós, va a ser nuestro canario universal.
Tenemos testimonios de aquella Traviata:
Una voz estupenda, cierto. Sin embargo, creo que la fama le llego tarde, otras voces del bell canto se hicieron mas populares.
ResponderEliminarEso es una frase de diva de las buenas, no de petarda de tres al cuarto, de DIVA de las de verdad.
ResponderEliminarVarias veces charlé con él y me pareció un divo tremendo. Eso no sé si es bueno o malo, porque reconozco que con su voz y sus ojos, yo sería mucho peor.
ResponderEliminarCada vez me gusta más esa estatua. Si a mi me hicieran una así no me aguantaba ni Cristo, que tiene un montón.
ResponderEliminarEl "Amami Alfredo" quedaría muy auténtico ¿No?
ResponderEliminar¿Que hay de lo que se decía de que por un duro mataba a un burro a pellizcones?
Hombre, yo recuerdo una gala benéfica en la que quería cobrar por cantar y que, por contrato, se dijera que no había cobrado.
ResponderEliminarPesetero sí, pero amigo, con esa voz...
Si juzgamos a los artistas por su personalidad, amigo mío, desde Miguel Ángel hasta Cecil "tiro mi silla al que esté más cerca" B. deMille pasando por Hitchcock "tírale un pájaro a Tippi a ver si se da cuenta de que soy su hombre".
Otras voces se hicieron más populares, entre otras cosas, porque cantaron con Bono y coleguillas.
ResponderEliminarLa pena es que la calidad del audio no sea mejor. Tal vez la Callas llegó demasiado pronto ;)
ResponderEliminaresto de llegar tarde o temprano me ha recordado la mega frase de mamma rose en esa obra maestra del musical americano que es Gypsy.
ResponderEliminarla frase de mamma rose justo antes de cantar ese verdadero show stop number que es rose's turn:
i was born too soon and started too late!!!!
Otras voces de su época se hicieron más populares porque realmente A. Kraus era un auténtico divo del Bell Canto, con todas las letras. Pero porque merecía serlo. Hoy en día esos aires que se daba, esa distancia con el público, quedaban anticuados, mas aún en tanto en cuanto, en la actualidad los artistas (suelen ser los que no lo son precisamente), hacen lo mismo, pero por detrás, como las puñaladas traperas. Hay que adherirse a todo lo benéfico para ser bueno, y darle de comer a la prensa... "Me hacen fotos en Africa y luego dejo al negrito en su choza y me largo en mi Rolls Royce a coger mi jet privado que me lleve a mi mega-mansión en L.A." (por ej.) En la época de la Callas (y comienzos de Kraus), una diva o un divo destacaban y eran respetados por su maestría y elegancia en la escena y precisamente por su aura de grandeza merecida.
ResponderEliminarPara mi gusto, ahora mismo no hay en la escena de la ópera, nadie que le llegue al tobillo.
Ya han pasado diez años de su muerte?!?!?, vaya, como pasa el tiempo.
ResponderEliminar