En el post de la pérdida de la mitomanía, apunté mi pasión desde hace unos años por el Sr. Sondheim. Personalmente pienso que es la gran creador de historias musicales que ha dado el siglo XX.
Cuando Lloyd Webber puso de moda los famosos musicales llenos de magia y espectáculo como Cats o El fantasma de la ópera (gracias a los cuales aparecieron maravillas tipo Les Miserables o Chess), Sondheim siguió haciendo musicales intimistas, con orquestas de cámara y en algunos casos, apenas tres cantantes.
Ajeno a las modas, siempre ha tenido un grupo de seguidores y un nutrido grupo de críticos que le consideran uno de los mejores artistas de la América contemporánea.
Pero lo que da gusto es verle hablar, la claridad de sus exposiciones, el humor sutil, y al mismo tiempo, la sencillez de sus melodías, la simplicidad de sus líneas de diálogo... un conjunto que hace que su obra sea, de verdad, sublime.
Por si fuera poco, a Sondheim cuesta quererlo. La primera vez que escuchas un musical suyo no te acaba de convencer, pero no sé muy bien como, no se puede ir de tu cabeza. Cuando repites la experiencia, ya has caído en su embrujo. Es un poco como ver Terciopelo Azul de David Lynch, la primera vez te deja perplejo, la segunda vez te ha pillado y te convierte en fanático discípulo.
Hoy he encontrado un corto vídeo (Youtube me sorprende todos los días) de Stephen Sondheim dando una especia de clase magistral a una estudiante de música. Es muy simple y al mismo tiempo, es curioso como quiere enfatizar y perfeccionar cada una de las frases. En un momento dado, corrige a la cantante en la frase "there ought to be clowns" ya que no se debe decir "ogtu" sino "ougt tu", con doble T. Un rasgo genial y perfeccionista.
El telón de fondo es la canción más conocida, aunque no la mejor, de Sondheim: Send in the clowns. En realidad, cada pieza de Sondheim es una pequeña obra maestra en sí misma.
Cuando Lloyd Webber puso de moda los famosos musicales llenos de magia y espectáculo como Cats o El fantasma de la ópera (gracias a los cuales aparecieron maravillas tipo Les Miserables o Chess), Sondheim siguió haciendo musicales intimistas, con orquestas de cámara y en algunos casos, apenas tres cantantes.
Ajeno a las modas, siempre ha tenido un grupo de seguidores y un nutrido grupo de críticos que le consideran uno de los mejores artistas de la América contemporánea.
Pero lo que da gusto es verle hablar, la claridad de sus exposiciones, el humor sutil, y al mismo tiempo, la sencillez de sus melodías, la simplicidad de sus líneas de diálogo... un conjunto que hace que su obra sea, de verdad, sublime.
Por si fuera poco, a Sondheim cuesta quererlo. La primera vez que escuchas un musical suyo no te acaba de convencer, pero no sé muy bien como, no se puede ir de tu cabeza. Cuando repites la experiencia, ya has caído en su embrujo. Es un poco como ver Terciopelo Azul de David Lynch, la primera vez te deja perplejo, la segunda vez te ha pillado y te convierte en fanático discípulo.
Hoy he encontrado un corto vídeo (Youtube me sorprende todos los días) de Stephen Sondheim dando una especia de clase magistral a una estudiante de música. Es muy simple y al mismo tiempo, es curioso como quiere enfatizar y perfeccionar cada una de las frases. En un momento dado, corrige a la cantante en la frase "there ought to be clowns" ya que no se debe decir "ogtu" sino "ougt tu", con doble T. Un rasgo genial y perfeccionista.
El telón de fondo es la canción más conocida, aunque no la mejor, de Sondheim: Send in the clowns. En realidad, cada pieza de Sondheim es una pequeña obra maestra en sí misma.
Justo el otro día estuve escuchando "A funny thing happened on the way to the forum" y me acordé de tí. Qué chorrada más grande, pero qué bien me lo pasé xD
ResponderEliminarAlguna otra cosa de Sondheim que me recomiendes? :3
Si no te sabes de memoria Sweeney Todd es obligatoria. Mi favorita es Passion y adoro desde lo más profundo de mi alma Sunday in the park...
ResponderEliminarMe alegra lo del Forum, para los españoles "Golfus de Roma", sin embargo, creo que es una de sus obras más flojitas... Por supuesto, superior a la media: Sondheim es Sondheim.
Por cierto, este es un comentario para mi hermana. Como verás he escrito en el comentario anterior "Sondheim es Sondheim". Un chiste personal que sólo tu puedes coger: "Mozart es Mozart".
ResponderEliminarDe acuerdo totalmente contigo...Mozart es Mozart
ResponderEliminarHola Sergio y a los demás.
ResponderEliminarParece que lo tuyo es la didáctica (aunque sea sin querer). Me ha gustado el vídeo, siempre se aprenden cosas nuevas, y mejor que sean cosas fáciles de digerir, digo yo.
La pena es que no puedo participar mucho de tu erudición, ya sabes que nunca se me han dado bien las mitomanías (quizás de lejos). A ver si un día me das alguna sorpresa relacionada con "La noche del cazador".
SALUD
¡Hola!
ResponderEliminarYa que estamos de cinefilias, recuerdos y búsquedas, os invito al humilde blog www.enrodajecanario.blogspot.com
Seguro que a Sergio algo de eso le sonará y otras cosas le actualizarán.
Salud